Vistas: 0 Autor: Patrick Publicar Tiempo: 2025-05-06 Origen: Sitio
En una era en la que la cultura corporativa a menudo lleva un asiento trasero a los márgenes de ganancias, Imfield , un innovador en la industria de la cachemira de Mongolia, ha redefinido audazmente la esencia de construir un legado arraigado en la unidad y la tradición. Recientemente, una iniciativa dirigida por empleados tenía como objetivo fotografiar 'Los hermosos momentos de la compañía' encendieron un movimiento que va más allá de la simple documentación.
La idea surgió orgánicamente durante una reunión de equipo regular cuando mi colega Nick propuso que nos centramos en capturar momentos dentro del espacio de trabajo de Imfield. 'Nuestro oficio no se trata solo de cachemir', dijo. 'Se trata de las manos que tejen la cachemira, las mentes que innovan continuamente y el arduo trabajo que defiende nuestra tradición.
Esta actividad de fotografía se centra en tres áreas clave:
1. Muro de fondo: los empleados se pararán frente al alivio del metal con el logotipo de la compañía, capturando momentos que reflejan nuestra identidad.
2. Área de trabajo: documentaremos las actitudes laborales positivas y dedicadas de los empleados. Nuestro ambiente de trabajo limpio y elegante mejora nuestro disfrute del trabajo y enfatiza nuestro compromiso de servir a cada cliente con seriedad.
3. Área pública: el salón se ha transformado en un centro para la comunicación. Una foto compartida en toda la compañía muestra un almuerzo animado lleno de risas, donde los empleados comparten historias sobre cachemira.
Capítulo 3: Cultura en cada hilo
Las fotografías revelaron verdades más profundas sobre el espíritu de Imfield. 'La cachemira mongol no es solo un producto, es una narrativa', dijo el CEO Nancy. 'Estas imágenes muestran cómo nuestros valores (la sostenibilidad, la artesanía y la comunidad) están integrados en cada hilo que producimos. ' Los empleados se hicieron eco de este sentimiento.
A medida que el proyecto fotográfico llega a su fin, su impacto permanece. Imfield Cashmere Company ha demostrado que la cultura corporativa no se forma únicamente en salas de juntas; Está formado en los momentos tranquilos entre tareas, en el orgullo compartido de un hilo bien hilado y en el compromiso colectivo de honrar el legado pastoral de Mongolia. Como expresó un empleado, 'no solo tomamos fotos; encontramos nuestra reflexión en la lana con la que trabajamos todos los días'.